Los shinigamis (parte 1)

Y comenzamos el año con el pié derecho, es decir, con una publicación que desde hace un tiempo tenía deseos de realizar pero los pendientes, no me dejaban desarrollarla con calma para todos ustedes.

Creo que más de uno de ustedes ha escuchado la palabra “shinigami”, al menos en series como Bleach, Kuroshitsuji, Naruto, entre otras. Bueno, en esta ocasión hablaremos de estos seres que más de uno, se siente atraído por ellos.

¿Qué es un “Shinigami”?

Literalmente, es lo que se conoce como un “ángel de la muerte”. Es un ser que pertenece a la mitología japonesa, creada a partir de la personalidad de uno de los dioses nipones más importantes y cuyo nombre es, Susanoo (dios de la tormenta). Este dios es el hermano de Amaterasu (diosa del sol) y de Tsuki-yomi (diosa de la luna), aunque su personalidad es algo distinta a ellas porque se le reconoce como al ser que, suele generar desastres.

Además de Susanoo, también se le adjudica esta figura a otra diosa de nombre Izanami, quien se considera una de las deidades creadoras del mundo, según los japoneses. La diferencia de ella es que muere en el parto de uno de sus hijos y, se va al mundo de los muertos o mejor conocido como  “Yomi-no-kuni” mientras que el joven dios, es autor de desastres.

Dado a estos datos, se observa con claridad que no existe una deidad específica que tenga que ver con la muerte; tanto es así que, se cree que su existencia es producto de la occidentalización. Lo anterior quiere decir que, al tratar de acercarse a las fuentes occidentales, los japoneses adoptaron a estos seres de acuerdo a sus propias tradiciones y costumbres; dando como resultado, el término “shinigami” sea relativamente nuevo.

Para otros puede ser algo sin mucha importancia, considerando un elemento del sintoísmo –principal religión de los japoneses-, el cual se trata de que la muerte sea algo impuro y por lo tanto, no existe el cielo sino un solo lugar al que llegan a todos.  

Con esto, se establece esta pregunta ¿cuál es el deber de los shinigamis? Ellos velan por las almas de los muertos o bien, terminan por comérselas. Otras de las funciones que se les ha adjudicado, es la decisión sobre quién y cómo morirá la victima; gracias a eso, algunos los consideran seres terribles y crueles cuando no deben ser tomados así porque simplemente, se llevan lo que ya NO es terrenal.

Dentro del sintoísmo son considerados dioses o “kamis”, parte de sus principios hablan de la idea de los seres con características mágicas, entes sagrados o superiores; en otras palabras, aquello que va más allá de las capacidades humanas, es considerado como dios. A pesar de eso, los shinigamis se encuentran en una categoría baja, pues esta religión posee una jerarquía de acuerdo al orden de la creación del universo; es decir, el cielo tiene el nivel más alto y de ahí, desciende hasta llegar al inframundo, sitio donde se encuentran establecidos los dioses de la muerte.

La naturaleza de estos seres, es distinta a otros dioses pues llegan a ser neutrales aunque las pocas ilustraciones sobre ellos, los describen como individuos con apariencia de demonios y sin belleza alguna.

Y con esto, se expone un dato importante a tomar en cuenta: esta visión proviene del sintoísmo aunque hay que recordar que, se está hablando de una religión que no posee un dogma definido como el cristianismo pero, ha tenido la ayuda del budismo por lo que la visión sobre los shinigamis llega a ser un poco más amplia al grado que, se establece la existencia de otro ser relacionado a la muerte: EnmaDaiOh (Yama para los budistas).

Yama es el dios de la muerte, el juez de las almas. Enma es su nombre japonés y a partir de esto, existe el “EnmaNoCho”, el cual se conoce como la corte de Yama. Gracias a esto se observa claramente que, el budismo posee una visión mucho más amplia sobre la muerte y con ello, los shinigamis van adquiriendo una personificación más definida, por lo que la parte sintoísta de estos seres se enlaza con la segunda religión más importante entre los nipones. No se quiere decir que, Enma sea uno de ellos porque este ser, tiene el deber de juzgar más no de arrebatar la vida a los que están a punto de morir.

Lo anterior quiere decir que se está presentando un proceso sobre la muerte, según los mitos y las visiones de los japoneses. Los shinigamis quitan la vida y llevan las almas al otro mundo mientras que Enma, las juzga.

Finalmente se puede decir que los shinigamis son producto de la mitología tanto sintoísta como budista pero curiosamente, es un término nuevo que en la modernidad se utiliza con mucha frecuencia. Por otro lado el mito y culto de estos seres no está completamente  conformado pero es claro que como toda cultura, exista una idea sobre la muerte y estos seres, son una muestra de ello.

A pesar de desconocer su verdadero origen, poseen características que los hacen atractivos para los conocedores de la cultura japonesa a pesar que, son seres que vemos en otros lugares y con otros nombres. Tal vez esto sea una de las muchas razones por las que no se les teme, pues no se les toma con la seriedad que deberían… después de todo, los propios japoneses han transformado su imagen.

¿Tú, humano… realmente piensas que los shinigamis son seres maravillosos o temibles?