Es curioso pensar por unos instantes ¿cómo el mundo observa a Japón? Todas y cada una de las personas lo imagina de mil formas, especialmente si existe algún elemento que lo identifique, ya sea gastronomía, música, moda, cine, entre otros. Debido a esto, es complicado que alguien no reconozcas a tan místico país.
Las naciones, desde una perspectiva occidental, posan sus ojos en el País del Sol naciente como si fuera un mundo mágico y desconocido. Si uno lo analiza desde los libros de historia de la educación básica, la existencia del Japón es casi mínima y los primeros datos para reconcomerla son los referentes a su participación en la Segunda Guerra mundial. Lo más sobresaliente, sin duda, es el terrible efecto generado por las bombas atómicas y de ahí, la vida tan peculiar con la que se toparon los estadounidenses durante la ocupación.
Todo esto fue creando una visión y un ideal sobre cómo debería ser un japonés aunque al visitar visitarlo, las ideas cambian por completo porque se genera una distorsión obtenida por la visión occidental. Por desgracia, a veces es complicado identificar por completo el mundo japonés, aunque sea con la ayuda de sus elementos más simbólicos como su cultura.
Gracias a su cultura podemos conocerlo, vivirlo y hasta disfrutarlo aunque siempre hay que tener presente que es necesario, el conocimiento previo de un Estado tan complejo como éste. Después de todo, se está hablando de individuos que poseen una forma peculiar de ver la vida, el ambiente y por ende, la forma de desarrollarse.
Es curioso que en un inicio, por tres siglos, estuvieran alejados del mundo externo y por una petición de Estados Unidos, se vieron obligados a la apertura de sus puertos y con ello, su debut ante los demás. A pesar de ello, muchos tenían conocimiento de su misticismo.
¿Qué se quiere decir con todo esto? Pues todos conocemos a este país aunque en ocasiones, sólo se tratan de cosas comunes o comerciales pero es un pequeño paso. Porque se trata de un mundo el cual, se le puede sacar un gran provecho para aplicarlo en la vida diaria y por ello, no es bueno solo sentirse “fan” del Japón.
Se trata de estudiarlo, entenderlo y analizarlo, el mundo con el tiempo, ha conocdio a los japoneses y a veces, creen que son personas que visten kimonos o bien, todo son geishas y sushi cuando la verdad, existe un campo muy amplio dentro de la gastronomía y las geishas, son mujeres envueltas en cultura y disciplina.
Japón no sólo se trata de cosplay o ánime sino, de un reflejo de la sociedad que invita a conocerlo de fondo. Ellos venden al mundo diferentes caras de su territorio porque desean ser reconocidos y claro, generar un intercambio cultural donde existe en enriquecimiento de conocimientos para ser mejores.
Tal vez, en otros aspectos como la diplomacia o la política, se muestren poco expertos pero todo lo hacen basándose en sus principios y su historia la cual, les falta adaptarse una vez más al mundo moderno pero eso, no les quita sus ideales por buscar vías alternas para relacionarse con otras naciones.
Finalmente, Japón no sólo se trata de la cara que nos vende o bien, el mundo occidental conoce por medio de elementos comerciales; sino que, se trata de una nación que debe verse con mente abierta y no juzgarlos por sus actos. Ellos han buscado con miles de elementos posicionarse como un país fuerte, así como considerarse una potencia económica y cultural.
De esta forma yo los invito a no quedarse con la imagen sencilla de los japoneses sino, adentrarse y/o aventurarse a conocer esos elementos que parecen raros; tales como el teatro kabuki, la danza, la religión o bien, su sistema político porque esto, ayudará a entenderlos mejor y tal vez, te lleves una gran sorpresa que de cómo resultado, tu completo enamoramiento que termine por crear una nueva visión de cómo debe ver el mundo al País del Sol Naciente.
Se despide con cariño,
Administradora de "Eternity".
No comments:
Post a Comment